martes, 17 de abril de 2007

Esta vez no estamos juntos.

Quizá para mañana sea tarde. ¿Qué has estado haciendo hasta ahora? ¿Rolando como una piedra? No te preguntaste porque te paso a ti. Le pusiste ilusión mientras duró. No te han arrebatado nada, diste pleno consentimiento. Pero eres una romántica, disfrutas con lo que la vida llueve y esta vez, sentiste que erais dos. No te gustan los dramas y prefieres la discreción, el sufrimiento en discreción, lo tienes así entendido. No te recrees, no juegues con esa idea. Joel Ramone empezó la aventura contigo. Le diste un poco de caña. Después tus paseos con tu cuerpo y la mente pensativa. Te pensabas que todos te miraban y que todos lo sabían. Si fuera porque te habían ‘querido’… No lo odias a él. Pero te acuerdas del otro. Que lejos estás, amor. No iré a buscarte porque eres un amor de otro tiempo, pero me he acordado mucho de ti. Y de tu piel, del color, del sabor y del olor. Esta vez no estamos juntos. Cuanto me quejé de que me tratabas como una princesa, yo quería ser una tigresa. Me lo diste todo y yo misma te aparté de mi lado. Todo me parecía demasiado. Ahora, me parece demasiado no tener absolutamente nada. Ellos me querían por fuera y confundí que era por dentro. Tú de tan adentro, me hiciste olvidar que también era por fuera. Vuelvo a estar aquí, sola. Delante de todos. Me queda un buen rato de caminar sola con mi cuerpo, y con mi vida. A veces, me sorprende de dónde saco yo la fuerza. Y me quedo con la boca abierta, espectando mis pasos, la vida que se sucede ante mi y que protagonizan mis curvas. ¿Dónde quedé yo? Algún día, supongo que más experimentada, tranquilamente, me sentaré, me haré un té, quizás te llamo y te cuento cosas…quizás algún día hasta puede que tenga un bebé. Te quiero, no sé qué tiempo hará por allí, aquí nos ilumina un sol maravilloso que llega con retraso. Te he visto en mis sueños y alguien hoy paso cerca de mí con tu colonia. Las señales que me dan vida.

No hay comentarios: