Buscando el Imposible - que huele a ratos-.

Porque me pareces imposible de buscar. Porque es imposible encontrarte. Porque te pones imposible. Porque si fuera posible con un ojo buscarte, ya no serías imposible. Y tu ojo inquieto, esperando que se presente algo siempre delante. Buscador de imposibles. Imposibilitando la búsqueda. Buscando posibles ojos y ojeando posibles búsquedas. Hueles a imposible y yo veo allí puesta la colonia. Mi ojo buscador, la encuentra siempre e el mismo lugar, imposible que no esté. Que se quede allí, imposibilitando que haya otras cosas, posibilitando una fragancia, buscando un perfume, viendo posibles ojos que son imposibles de buscar sino es que se encuentran por sí solos, de casualidad...normalmente lejos del frasco Imposible, a unos metros, oliéndolo sin verlo, viéndolo sin olerlo. Me imposibilitas tanto que veo posible y lo más factible una escapada sin olor a ser posible muy lejos de tanto y tanto y tanto imposible. Aroma que embriaga, pero no te engañes, es un imposible puesto en un frasco que también se evapora posiblemente dentro de muy poco. Déjalo ahí, reposando, y pronto un día, que el ojo que todo lo busca, encuentre algua gota...la última gota.....que esté mirando también y aunque no busque, es posible que encuentre una escapada fuera del frasco, sea en tu piel, sea en la de otro. Imposible saberlo. Imposible quererlo.