domingo, 13 de enero de 2008

Todas las personas mayores antes han sido niños. (Pero pocas de ellas lo recuerdan).

2 comentarios:

Chair de fleur dijo...

Yo tengo la decimoquinta edición de "El principito" del año 1980, comprado en la librería Bertomeu de Denia.

Adoro el capitulo XII:

El siguiente planeta estaba habitado por un bebedor. Esa visita fue muy corta, pero hundió al principito en una gran melancolía:

- Qué haces ahí ? – le dijo al bebedor, que encontró instalado en silencio ante una colección de botellas vacías y una colección de botellas llenas.

- Bebo – respondió el bebedor, con aire lúgubre.

- Por qué bebes ? – le preguntó el principito.

- Para olvidar – respondió el bebedor.

- Para olvidar qué ? – inquirió el principito, que ya lo compadecía.

- Para olvidar que tengo vergüenza – confesó el bebedor bajando la cabeza.

- Vergüenza de qué ? – se informó el principito, que deseaba socorrerlo.

- Vergüenza de beber ! – concluyó el bebedor que se encerró definitivamente en el silencio.

Y el principito se fue, perplejo.

Los adultos son decididamente muy pero muy extraños, se decía a sí mismo durante el viaje.

LULÚ dijo...

Pues no bebas...