miércoles, 5 de septiembre de 2007

Con todo aquello que los demás detestan que yo aprecio, que los demás aprecian, que yo detesto.

Si fuera que toda la vida hemos estado aquí, no estaríamos aquí. O estamos aquí porque lo estuvimos siempre. En Grecia no había estado antes. ¿Olvidé algo allí? Creo me dejé una formulita para procesar mejor mentalmente. No sé si en una cala, en un apartamento, en un ferry, en un bar, en una taverna. Aquél día, tenía el océano para mí, brindaba con mi alma y cualquier elemento desestabilizador prescindible era rechazado. A tomar viento que continúo siendo yo. Traje conmigo la idea del ballet que ya es mucho. Y el resto, lo retomo. Voy a darme una vuelta. Empecemos otra vez, con todo aquello que los demás detestan que yo aprecio, que los demás aprecian, que yo detesto.

No hay comentarios: